viernes, 26 de diciembre de 2008

PETER F. DRUCKER, LA EXISTENCIA HUMANA EN TENSION

Para Kierkegaard, la existencia humana solo es posible bajo tensión- la tensión que se da por la vida simultánea de hombre como individuo en el espíritu y como ciudadano en la sociedad.

El signo mas revolucionario de nuestro tiempo es la desintegración del carácter racional de la sociedad y de la relación racional entre el individuo y la sociedad.
La sociedad debe posibilitarle al hombre morir sin desesperación, si quiere que el pueda vivir exclusivamente en sociedad. Y solo puede hacerlo de una manera: quitándole significado a la vida individual. Si usted no es más que una hoja en el árbol de la raza, una célula en el cuerpo de la sociedad, entonces su muerte no es realmente muerte; es mejor que la considere un proceso de regeneración colectiva. Pero entonces su vida tampoco es una vida real: es solo un proceso funcional dentro de la vida de la totalidad, desprovisto de todo significado, excepto en términos de la totalidad. Así, un optimismo que proclama la existencia humana en sociedad lleva directo a la desesperación, y esa desesperación solo puede llevar al totalitarismo. La existencia humana es posible como existencia en la fe. La fe es la creencia de que para Dios lo imposible es posible, que el tiempo y la eternidad son una sola cosa en El, que tanto la vida como la muerte tienen un significado.

ACTIVIDAD SUGERIDA: Reflexione sobre lo siguiente: “La existencia humana solo es posible bajo tensión- la tensión que se da por la vida simultanea del hombre como individuo en el espíritu y como ciudadano en la sociedad.

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