PETER F. DRUCKER, LA NECESIDAD DE ARMONIZAR INTERESES

La demanda de armonía no significa que la sociedad deba abandonar su derecho a limitar el ejercicio del poder económico por parte de las corporaciones.

El propósito económico no significa que la corporación deba estar libre de obligaciones sociales. Por el contrario, debe estar organizada de tal modo que satisfaga, automáticamente, sus obligaciones sociales, en el mismo acto de procurar su propio interés. Una sociedad individual, basada en la corporación, solo pude funcionar si la corporación contribuye a la estabilidad social y a la consecución de los objetivos sociales, independientemente de la buena voluntad o de la conciencia social de la gerencias corporativas individuales.
Al mismo tiempo, la demanda de armonía no significa que la sociedad deba abandonar sus necesidades y objetivos, y renunciar a su derecho a limitar el ejercicio del poder económico por parte de la corporación. Por el contrario, es una función esencial de las autoridades establecer un marco dentro del cual actúen las instituciones y los individuos. La sociedad debe estar organizada de tal modo que no haya tentación de implantar, en nombre de la estabilidad o de las creencias sociales, medidas que sean contrarias a la supervivencia y estabilidad de sus instituciones representativas.

ACTIVIDAD SUGERIDA: Hasta principios del 2004, muchos muy bien conocidos fondos mutuos permitieron a grandes clientes comerciar fondos después del cierre de las actividades bursátiles, lo cual les daba a estos grandes clientes la ventaja de conocer el precio de venta en el momento mismo de la venta, un beneficio del cual no dispone el accionista común. Envíe un correo electrónico al presidente de un fondo mutuo en el que usted tenga acciones y pídale pruebas de que usted no ha resultado perjudicado por esa práctica