LISTIN DIARIO
SANTIAGO.- Las empresas de zona franca que integran el Grupo M cancelaron este mes de diciembre a 4,000 empleados que laboraban en sus distintas naves y oficinas en República Dominicana y Haití, con lo que asciende a unas 30,000 las plazas de empleos suprimidas durante el presente año en este sector productivo.
La información la ofreció el presidente de la Unión Nacional de Trabajadores de Zonas Francas (Unatrazona), Carlos Guillén, quien afirmó que el pasado viernes la empresa, con asiento en esta ciudad, comunicó a los empleados el vencimiento de sus contratos.
Una fuente ligada al Grupo M, que preside el empresario Fernando Capellán, confirmó anoche a LISTÍN DIARIO que las empresas del consorcio se vieron obligadas a rescindir los contratos de 3,000 trabajadores, de una plantilla de 8,000 que tenían en este lado de la frontera norte de Dajabón.
La fuente agregó que las cancelaciones también afectaron a mil trabajadores haitianos que laboraban en la zona franca del otro lado del río Masacre. En Haití el Grupo M tenía una plantilla de 3,000 trabajadores y sólo se quedó con 2,000.
“Todos los cancelados fueron cesanteados y muchos quedaron conformes con la compensaciones recibidas”, dijo Guillén, para agregar que antes de la rescisión de los contratos el Grupo M notificó el preaviso de 28 días a los trabajadores que continuaron laborando hasta el pasado viernes, conforme a las leyes laborales del país.
Dijo que los ejecutivos de ese importante grupo de empresas de zona franca de Santiago cumplieron con los requisitos establecidos en la Ley de Trabajo al entregar las prestaciones laborales correspondientes a todos los obreros despedidos.
Según Guillén, el Grupo M, como otros consorcios de zonas francas similares, se han visto obligados a cancelar a una gran parte de sus empleados debido a las dificultades económicas que continúan confrontando por la crisis financiera global que afecta a casi todas las naciones del mundo.
Conocidas marcas de costura, como Levi’s y Claybo, que terminaban sus productos para el mercado de Estados Unidos, han despedido a trabajadores debido a la crisis, dijo Guillén, tras añadir que más de 500,000 empleados han sido despedidos en ese país.
La actual situación, agregó, ha conllevado a la reducción de los niveles de compra de los ciudadanos que residen en Estados Unidos. “También han disminuido de manera notable los pedidos de trabajo por parte del mercado estadounidense en perjuicio de las empresas de zonas francas del país, especialmente de las textileras”, dijo. Guillén auguró que el año 2009 será difícil para el sector zona franca, porque otras empresas están cerrando operaciones y se prevé que por esas razones continuarán los despidos.
Según Guillén, durante los últimos meses del 2008 se han perdido en Santiago unos 30,000 empleos, y que durante el 2007 y una buena parte de este año fueron cesanteados casi 72,000 obreros del sector.
Dijo que las zonas francas empleaban alrededor de 108,000 trabajadores, pero que han perdido su capacidad de captar divisas para el país.
Guillén manifestó que muchos esperan que el Gobierno, al igual como hizo con los 900 trabajadores cancelados de la Falconbridge, en Bonao, ayude al sector zona franca para que se pueda mantener y crear nuevos empleos.
“El gobierno tiene que ampliar su ayuda para que el sector no colapse definitivamente y continúe aportando divisas y empleos, que son la base principal el crecimiento económico de la nación”, apuntó.
SANTIAGO.- Las empresas de zona franca que integran el Grupo M cancelaron este mes de diciembre a 4,000 empleados que laboraban en sus distintas naves y oficinas en República Dominicana y Haití, con lo que asciende a unas 30,000 las plazas de empleos suprimidas durante el presente año en este sector productivo.
La información la ofreció el presidente de la Unión Nacional de Trabajadores de Zonas Francas (Unatrazona), Carlos Guillén, quien afirmó que el pasado viernes la empresa, con asiento en esta ciudad, comunicó a los empleados el vencimiento de sus contratos.
Una fuente ligada al Grupo M, que preside el empresario Fernando Capellán, confirmó anoche a LISTÍN DIARIO que las empresas del consorcio se vieron obligadas a rescindir los contratos de 3,000 trabajadores, de una plantilla de 8,000 que tenían en este lado de la frontera norte de Dajabón.
La fuente agregó que las cancelaciones también afectaron a mil trabajadores haitianos que laboraban en la zona franca del otro lado del río Masacre. En Haití el Grupo M tenía una plantilla de 3,000 trabajadores y sólo se quedó con 2,000.
“Todos los cancelados fueron cesanteados y muchos quedaron conformes con la compensaciones recibidas”, dijo Guillén, para agregar que antes de la rescisión de los contratos el Grupo M notificó el preaviso de 28 días a los trabajadores que continuaron laborando hasta el pasado viernes, conforme a las leyes laborales del país.
Dijo que los ejecutivos de ese importante grupo de empresas de zona franca de Santiago cumplieron con los requisitos establecidos en la Ley de Trabajo al entregar las prestaciones laborales correspondientes a todos los obreros despedidos.
Según Guillén, el Grupo M, como otros consorcios de zonas francas similares, se han visto obligados a cancelar a una gran parte de sus empleados debido a las dificultades económicas que continúan confrontando por la crisis financiera global que afecta a casi todas las naciones del mundo.
Conocidas marcas de costura, como Levi’s y Claybo, que terminaban sus productos para el mercado de Estados Unidos, han despedido a trabajadores debido a la crisis, dijo Guillén, tras añadir que más de 500,000 empleados han sido despedidos en ese país.
La actual situación, agregó, ha conllevado a la reducción de los niveles de compra de los ciudadanos que residen en Estados Unidos. “También han disminuido de manera notable los pedidos de trabajo por parte del mercado estadounidense en perjuicio de las empresas de zonas francas del país, especialmente de las textileras”, dijo. Guillén auguró que el año 2009 será difícil para el sector zona franca, porque otras empresas están cerrando operaciones y se prevé que por esas razones continuarán los despidos.
Según Guillén, durante los últimos meses del 2008 se han perdido en Santiago unos 30,000 empleos, y que durante el 2007 y una buena parte de este año fueron cesanteados casi 72,000 obreros del sector.
Dijo que las zonas francas empleaban alrededor de 108,000 trabajadores, pero que han perdido su capacidad de captar divisas para el país.
Guillén manifestó que muchos esperan que el Gobierno, al igual como hizo con los 900 trabajadores cancelados de la Falconbridge, en Bonao, ayude al sector zona franca para que se pueda mantener y crear nuevos empleos.
“El gobierno tiene que ampliar su ayuda para que el sector no colapse definitivamente y continúe aportando divisas y empleos, que son la base principal el crecimiento económico de la nación”, apuntó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario